jueves, 10 de julio de 2014

Para Reflexionar


Un Hombre tenía una novia



El estaba ya cansado de ella, porque ella le mandaba mensajes a toda hora que decían: “te extraño” o “TQM”. 



Una noche antes de acostarse recibió un mensaje pero en vez de leerlo se acostó a dormir.

En la mañana siguiente se despertó con una llamada

era la mama de su novia llorando diciendo que a la novia la habían matado en la noche anterior. 

El colgó la llamada en estado de shock fue a ver el mensaje:
 “Amor, ven rápido, creo que alguien me esta siguiendo”

Moraleja

Nunca rechaces aquellos que te aman o se preocupan por ti. 

Porque algún día entenderás que perdiste la luna mientras contabas las estrellas.



Amor se escribe con"P" .


Porque para AMAR se debe poseer PACIENCIA en los momentos en que el mismo AMOR te pone a prueba.



Porque para olvidar un mal recuerdo debe existir PERDÓN antes que el odio entre personas que se aman.

Porque para obtener lo que deseas debes PERSEVERAR hasta alcanzar lo que te has propuesto.

El verdadero AMOR se escribe con "P"...porque PACIENCIA, PERDÓN y PERSEVERANCIA son ingredientes necesarios para que un AMOR perdure.

Porque AMOR es también...una PALABRA dicha a tiempo...
Es permitir volver a confiar..

Es PERMANECER en silencio escuchando al otro...

Es esa PASIÓN que nos llena de estrellitas los ojos al pronunciar el nombre del que amamos...

El AMOR se escribe con "P"... porque son esas PEQUEÑAS cosas las que nos unen al ser amado, día tras día. ”.






También los hombres necesitan de mimos.






El buen trato y el valorarse debe de ser mutuo. 


Así como hay mujeres que desean que la traten bien, así también hay hombres que desean que lo valoren, porque no tiene sentido de que sea solo uno, el que demuestre con hechos y no con palabras, el verdadero significado de lo que es amar con el corazón

Porque ellos también merecen ser tratados como reyes, ya que los hombres también necesitan de gestos de cariño y atención y merecen detalles que demuestren que ellas también se desviven por ellos.

Hay hombres que son muy tiernos y lindos que si se merecen un buen trato de parte de las mujeres.

todos necesitamos sentirnos importante y amados por alguien.

Amar es de dos personas por que las dos personas tienen que poner de su parte si no la relación no prospera. 

Cada uno debe dar lo mejor de cada uno para que esa relación funcione.

Y existe ese dilema a veces la mujer da y el recibe, o al revés el da y ella no...pero el que ama de verdad sabe que el amor no se grita se demuestra en todos los sentidos.

El amor verdadero es reciproco también los hombres merecen atenciones detalles, romanticismo, lealtad, sinceridad y un amor sincero sin condiciones, porque simplemente debemos tratar a los demás como nos gustaría que nos trataran.

Al Hombre hay que tratarlo como un rey ... !!

digno de una reina ... !!



Con el Tiempo.




"Después de un tiempo, uno aprende la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma, que el amor no significa acostarse y una relación no significa seguridad; y uno empieza a aprender que los besos no son contratos y los regalos no son promesas; y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos.


Y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy, porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes... y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad.

Y después de un tiempo uno aprende que si es demasiado, hasta el calorcito del sol quema. 

Que hay que plantar su propio jardín y decorar su propia alma, en lugar de esperar a que alguien le traiga flores. Y uno aprende que realmente puede aguantar, que uno realmente es fuerte, que uno vale, y con cada día... uno aprende.

Con el tiempo aprendes que estar con alguien porque te ofrece un buen futuro, significa que tarde o temprano querrás volver a tu pasado.

Con el tiempo comprendes que sólo quien es capaz de amarte con tus defectos, sin pretender cambiarte, puede brindarte toda la felicidad que deseas.

Con el tiempo te das cuenta de que si estás al lado de esa persona sólo por compañía a tu soledad, irremediablemente acabarás no deseando volver a verla.

Con el tiempo te das cuenta de que los amigos verdaderos valen mucho más que cualquier cantidad de dinero.

Con el tiempo entiendes que los verdaderos amigos son contados, y que el que no lucha por ellos tarde o temprano se verá rodeado sólo de amistades falsas.

Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en un momento de ira pueden seguir lastimando a quien heriste, durante toda la vida.

Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es sólo de almas grandes.

Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo duramente, muy probablemente la amistad jamás volverá a ser igual.

Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible.

Con el tiempo te das cuenta de que el que humilla o desprecia a un ser humano tarde o temprano sufrirá las mismas humillaciones o desprecios multiplicados al cuadrado.

Con el tiempo comprendes que apresurar las cosas o forzarlas a que pasen ocasionará que al final no sean como esperabas.

Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro, sino el momento que estabas viviendo justo en ese instante.

Con el tiempo verás que aunque seas feliz con los que están a tu lado, añorarás terriblemente a los que ayer estaban contigo y ahora se han marchado.

Con el tiempo aprenderás que intentar perdonar o pedir perdón, decir que amas, decir que extrañas, decir que necesitas, decir que quieres ser amigo, ante una tumba ya no tiene ningún sentido. "

(Jorge Luis Borges)




Algunos de los mejores momentos en la Vida



*Enamorarse

*Reírse hasta que te duela la panza. 

*Escuchar tu canción favorita en la radio. 
*Acostarte en tu cama y escuchar cómo llueve afuera. 
*Aprobar tu último examen. 
*Recibir una llamada de alguien que hace mucho no ves. 
*Una buena conversación
*Encontrar dinero en un pantalón que no usabas desde el año pasado. 
*Reírse de uno mismo. 
*Llamadas a medianoche que duran horas. 
*Reírse sin motivos. 
*Escuchar accidentalmente que alguien dice algo bueno de ti. 
*Despertarte y darte cuenta que todavía puedes dormir un par de horas. 
*Escuchar la canción que te hace recordar a "esa" persona especial. 
*Ser parte de un equipo
*El primer beso
*Hacer nuevos amigos
*Sentir cosquillitas en la panza cada vez que ves a "esa" persona. 
*Pasar un rato con tus mejores amigos
*Ver felices a las personas que quieres. 
*Volver a ver a un viejo amigo y sentir que las cosas no cambiaron. 
*Mirar un atardecer
*Tener a alguien que te diga que te quiere.





miércoles, 9 de julio de 2014

Todo sobre el chocolate.


Qué es el chocolate



El chocolate es un alimento que se obtiene procesando las habas de las vainas del árbol del cacao (Theobroma cacao). Estas habas tienen un intenso sabor amargo y deben dejarse fermentar para que desarrollen su característico sabor. 

Tras la fermentación las habas son secadas, limpiadas y tostadas antes de quitarles la cáscara.


Una vez limpias las habas son molidas hasta conseguir una pasta fluida pero densa que se conoce como masa de cacao (cocoa mass o cocoa liquor). 

Esto es el chocolate en su forma más pura pero que aún puede procesarse más para separar sus dos componentes principales:
 los sólidos del cacao y la manteca de cacao. 

Con estos dos componentes y otros ingredientes añadidos se elaboran todos los tipos diferentes de chocolate que pueden encontrarse en el mercado.



El árbol de cacao



El árbol de cacao (lat. Theobroma Cacao, que significa literalmente ‘ alimento de los dioses ') 

es un árbol tropical que crece sólo en climas calientes y húmedos. Es por eso que su cultura está limitada a las regiones que se sitúan a 20 grados de latitud Norte y 20 grados de latitud Sur.


Es un árbol delicado y exigente: le hacen falta una temperatura constante de cerca de 24-26 grados centígrados, lluvias abundantes y regulares, y un suelo rico en potasa, en nitrógeno y en oligo-elementos. El joven árbol de cacao es particularmente sensible al sol y al viento, y necesita desarrollarse a la sombra de otros árboles llamados ‘ madres del cacao ' tales como el banano, el algodonero, el caucho, etc. Mide cerca de 5 metros en 3 años, y alcanza 8 metros hacia la edad de 10 años. Un árbol vive hasta los 30-40 años. En plantación, los árboles de cacao son reemplazados por jóvenes árboles a partir de 25 años.

El cacao produce millares de flores todo el año. 
En la naturaleza, la polinización es asegurada únicamente por pequeñas moscas del género Forcipomyia. Solamente 5 a 10 % de las flores son fecundadas, hay que esperar entonces 5 meses para que un fruto, bajo la forma de una mazorca, se forme.

Una mazorca madura de cacao puede pesar, según la variedad, de 200 gr a 1 kg y contiene 30 a 40 semillas formadas en racimo y envueltas en una gelatina blanca (o ' mucilage '), que hace la delicia de los monos y de los loros. 
Antes de madurar, la mazorca es verde o rojo - morado. 
Se vuelve amarilla o anaranjada a la madurez 
y mide cerca de 20 cm sobre 7 a 9 cm de ancho.

   






El árbol de cacao 
es muy sensible a los devastadores y a las enfermedades. Entre las enfermedades debidas a los hongos, citemos la de la escoba de la bruja (sobre todo en América del Sur) y la podredumbre morena de mazorcas (sobre todo en áfrica). Insectos, de la familia de los mirides, se llevan la desecación de las jóvenes mazorcas. En Sudeste asiático, el insecto ‘ taladrador de mazorcas ' provoca daños considerables. Las pérdidas debidas a diversas enfermedades y parásitos afectan aproximadamente 20 a 30 % de la producción total de cacao.



La cosecha de mazorcas se efectúa al machete. Después de desgranar, las semillas (o habas) son fermentadas luego secadas al sol. Un árbol en cultura produce por término medio 0,500 a 2 kg de habas secas al año. Las plantaciones de los países productores generalmente aplican una densidad de 1000 o 1200 cacaos por hectárea. Una explotación de cacao se vuelve rentable al cabo de aproximadamente 6 años. Su vida útil económica es de 15 a 40 años.





Desde las civilizaciones antiguas hasta las modernas, han encontrado en los productos derivados del cacao un alimento sabroso y nutritivo. Pero, más allá de los deliciosos manjares que se elaboran a partir de este fruto, sus propiedades son de gran beneficio para nuestra salud, favoreciendo nuestro organismo de una forma casi medicinal.



¿Cuáles son las propiedades del chocolate? 

¿Sabías que el cacao es el aliento más antioxidante del Planeta Tierra? Pues bien, ya lo sabes. Este fruto contiene más antioxidantes que el te verde, el acaí, las bayas goji y cualquier 'super alimento' del mercado.

Aunque el valor nutricional de chocolate varía en función del tipo de chocolate, en general puede decirse que es un alimento muy calórico debido a su contenido en grasas e hidratos de carbono, pero también contiene cantidades apreciables de fibra, vitaminas y minerales.

El chocolate contiene asimismo una gran variedad de sustancias que producen diversos efectos en la química del cuerpo humano tales como la cafeína (presente en pequeñas cantidades) y la teobromina, dos alcaloides responsables de su efecto ligeramente estimulante o la feniletilamina, otro alcaloide con propiedades similares a de las anfetaminas que le otorga un efecto euforizante y psicoactivo. El chocolate también es rico en polifenoles, un grupo de sustancias con capacidades antioxidantes.

Entre los compuestos presentes en el cacao, se encuentran los antocianinas, isoflavonas, flavanonas , flavonoles, flavanoles, y flavonas. Una combinación potente que previene el envejecimiento prematuro, la aparición de células cancerígenas y los problemas degenerativos de los órganos.

Además de disminuir la presión arterial y mejorar la salud de los vasos sanguíneos, el consumo de cacao disminuye colesterol "malo". Su consumo también se ha vinculado con la reducción de los factores de riesgo en diabéticos.

Como si lo anterior fuese poco, el fruto del cacao ayuda a regular el azúcar en la sangre. Además, de acuerdo con el trabajo realizado en el Departamento de Nutrición de la Universidad de California, se encontró que el cacao no solo inhibe la agregación plaquetaria, también diluye la sangre, lo cual ayuda a prevenir problemas de coagulación.

Otra dimensión de los beneficios de consumo del cacao tiene que ver con los estados de ánimo, ya que este fruto es rico en agentes que mejoran la producción de diversos productos químicos en el cerebro, en particular, la serotonina y la dopamina. Esto significa que el cacao posee antidepresivos naturales.
Prefiere el cacao en su versión más pura, sin grasa o azúcar .

Ya sea una taza de cacao caliente o un trozo de chocolate, en este manjar de la naturaleza se esconden grandes beneficios aplicables a la salud y a la belleza también. De hecho, hoy en día cientos de productos cosméticos contienen cacao para enriquecer sus resultados.

Así que ya lo sabes, ponle cacao a tu vida para tener una mejor salud y hasta un mejor estado de ánimo. Un fruto de la naturaleza lleno de milagros naturales.

¿Qué tipos de habas de cacao se utilizan para elaborar chocolate? 

Sea cual sea el chocolate que se compre siempre hay que tener presente que el sabor final del chocolate dependerá en gran medida de la selección y mezcla de tipos de habas de cacao que se haya utilizado en su elaboración. Las tres variedades principales de habas de cacao utilizadas para elaborar el chocolate son:

Criollo: esta especie es nativa de Centroamérica y representa apenas el 5% del cacao cultivado mundialmente. Es la variedad más apreciada y la que produce los chocolates más aromáticos y complejos.


Forastero: cultivada tanto en África Occidental como en el Amazonas, es la especie más común de cacao y representa el 70 % de la producción mundial. Es la variedad con la que están hechos la mayoría de chocolates y de dónde éstos obtienen el característico sabor a chocolate.


Trinitario: originario de Trinidad, pero actualmente cultivado por toda la franja tropical, es una variedad híbrida entre las dos anteriores. Es un cacao aromático y rico en materia grasa.

Como el chocolate se elabora a partir de una mezcla de los diferentes tipos de habas de cacao, la cantidad y calidad utilizada de cada tipo es lo que verdaderamente marca las diferencias en el producto acabado. Cada fabricante utiliza una combinación especial que suele ser secreta y que es la responsable del sabor final de la mayoría de sus productos. Esto es lo que hace posible que dos chocolates del mismo tipo pero de distintas marcas lleguen a tener sabores tan diferentes.

¿Cómo se elabora el chocolate? 

Una vez recogidas las vainas del árbol del cacao y extraídas las preciadas habas que contienen, se las deja fermentar hasta siete días para que desarrollen su característico aroma. Después de la fermentación las habas se dejan secar y, una vez secas, son enviadas a las fábricas de chocolate. Ya en la fábrica, son limpiadas, tostadas y separadas según su calidad. A partir de este punto sólo hace falta quitarles la cáscara para extraer los nibs, molerlos y fundir la pasta de cacao cuyo resultado es lo que se conoce como chocolate puro en forma líquida o licor de chocolate. Si se desea, éste puede procesarse aún más y separarlo en sus dos componentes básicos: los sólidos de cacao y la manteca de cacao. 

Finalmente, el proceso de elaboración del chocolate comienza mezclando las proporciones de los componentes básicos con el azúcar y los otros ingredientes que se añadan según el tipo de chocolate. Pero esta mezcla aún necesita ser triturada-refinada (conchado) hasta conseguir una pasta perfectamente homogénea y fina que es la que realmente marcará la calidad del futuro chocolate. El paso final consiste en temperar o templar el chocolate, un proceso con el que se consigue dar estructura a los cristales de manteca de cacao y que hace que el chocolate final quede brillante, duro y aguante el contacto con las manos sin derretirse. Una vez temperado el chocolate ya está listo para verter en los moldes, enfriar, embalar y almacenar.



           

¿Cuáles son los tipos de chocolate.



Una clasificación sencilla de los chocolates es la que se hace popularmente en relación al aspecto externo que presentan, dando lugar a la división entre chocolate negro, con leche y blanco. Pero, en realidad, técnicamente es mucho más complejo y, de hecho, las clasificaciones pueden llegar a ser muy dispares en función del mercado de origen de cada chocolate. Hay que tener presente que el del chocolate es un mercado muy dinámico que carece de uniformidad de criterios pero, en términos generales, ésta sería una clasificación válida para España y los países de la Eurozona.


Chocolate Puro o Pasta de Cacao: este el chocolate en su forma más pura. Contiene los mismos elementos que componen las habas de cacao y en los mismos porcentajes. No se añade ni se extrae nada de él. Se utiliza para elaborar los otros chocolates y, ocasionalmente, en repostería o para degustación. Este es un producto poco habitual en los mercados europeos, pero sí en los americanos donde se conoce comúnmente como un sweetened chocolate.

Chocolate Negro: es el típico chocolate de color más oscuro que, de acuerdo con la legislación europea, debe tener como mínimo un 35% de cacao, azúcares y aromas (vainilla) y estabilizadores (lecitina) en porcentajes muy pequeños. Lo más habitual, sin embargo, es encontrar los chocolates negros en el rango de los 45-99% de cacao. Lo que implica que conforme se incrementa el porcentaje de cacao en el chocolate, se reduce la cantidad de azúcar y el chocolate resulta cada vez más amargo. Esta es la causa que en los países anglosajones se etiquete también con referencias a lo amargo que resulta al probarlo (bittersweet/semisweet/sweetchocolate). Según esto, el chocolate bittersweet suele tener un 70% (o más) de cacao, el semisweet entre 50-60% y el sweet entre el 35-45%. El chocolate negro es el más utilizado en repostería.

Chocolate con leche: es el chocolate típicamente de color más claro y de acuerdo con la legislación europea debe tener como mínimo un 25% de cacao y un mínimo del 14% de sólidos de leche. El resto, como en el caso del chocolate negro, son principalmente azúcares y, en menor porcentaje, aromas y estabilizadores. Este chocolate se utiliza en menor medida en repostería pero acostumbra a ser el más consumido. Aunque el porcentaje mínimo requerido de cacao es del 25%, un chocolate con leche de buena calidad puede llegar a alcanzar hasta el 40% de cacao.

Chocolate blanco: 
Técnicamente, no es un chocolate propiamente dicho porque la única parte del cacao que se utiliza en su elaboración es la manteca de cacao y, por tanto, carece de los sólidos del cacao que son los auténticos responsables del color, aroma y sabor del chocolate. De acuerdo con la legislación europea, este tipo de chocolate debe tener como mínimo un 20% de manteca de cacao y un mínimo del 14% de sólidos de leche. Es importante asegurarse de que el chocolate blanco que se compre sea auténtico y esté hecho con manteca de cacao y no con otras grasas vegetales. Este chocolate destaca por su brillante color marfil y, por ello, tiene múltiples aplicaciones en repostería.

Chocolate de cobertura:
Es el término con el que se conoce a cualquiera de los tres tipos de chocolate (blanco, con leche o negro) cuando su contenido en manteca de cacao es superior al 31%, un alteración que es ideal para el uso que están designados, proporcionando una textura más líquida y un acabado brillante. 

¿Qué otros productos relacionados con el chocolate se utilizan en repostería? 

Chocolate a la taza: este chocolate se elabora a partir de los productos del cacao (como mínimo debe contener el 30%) al que se añaden azúcares y harinas o almidones de trigo, arroz o maíz (hasta un 18% como máximo). Es el típico chocolate que se mezcla con la leche u otro líquido caliente para beber y nunca se utiliza en repostería debido a los espesantes que contiene.

Fideos o Vermicelli: son los típicos fideos de chocolate que se utilizan para decorar las tartas o rebozar las trufas. Hay que asegurarse de que estén hechas con auténtico chocolate (sólidos de cacao y manteca de cacao) y no se trate de un producto elaborado con otros tipos de materia grasa y aromas artificiales que imitan al chocolate.

Chips de Chocolate: son las clásicas gotitas de chocolate que se utilizan para hacer las cookies, los muffins, los brownies, etc.

La principal característica de las chips de chocolate consiste en que mantienen su forma bajo el horno moderado y sólo se funden parcialmente. Para conseguir esto la mayoría de marcas utilizan chocolates con porcentajes menores de manteca de cacao y, en muchos casos, incorporan grasas vegetales. Las dimensiones pueden variar según el fabricante y el uso para el que estén específicamente diseñadas. Pueden encontrarse en diferentes variedades (blancas, negras y con leche) según el chocolate con el que estén hechas y también pueden hacerse de forma casera.

Nibs de Cacao (cocoa nibs): son los pequeños trozos de habas de cacao, del tamaño de un grano de café o menos, antes de ser molidos para convertirlos en pasta de cacao. Las nibs de cacao tienen un punto amargo como los granos de café pero son algo más crujientes que aquellos y se utilizan para potenciar el aroma del propio chocolate añadiéndolas a cookies, muffins u otros postres.

Manteca de Cacao: es el resultado de extraer la grasa natural de las habas de cacao durante el proceso de fabricación del chocolate y el cacao en polvo. Tiene un color blanco marfil y es la responsable de la textura cremosa de los chocolates que hace que se fundan en la boca. La manteca de cacao se utiliza para convertir chocolates normales en chocolates de cobertura o conseguir extras en el fundido y la cremosidad.

Cacao en polvo: el cacao en polvo se obtiene de la pasta oscura y amarga resultante del prensado de la molienda de las semillas de cacao una vez retiradas tres cuartas partes de su manteca. La mayoría de cacaos en polvo tienen entre un 20-22% de materia grasa, razón por la cual la mayor parte de postres de chocolate bajos en grasa están hechos con cacao en polvo. No debe confundirse el cacao en polvo “puro” con los preparados a base de polvo de cacao (Colacao, Nesquik, Paladín, etc ) porque éstos llevan otras sustancias añadidas y no son adecuados para la repostería.

¿Cómo debe conservarse el chocolate? 

El chocolate es un producto relativamente delicado y que puede verse perjudicado por factores como la humedad, la temperatura y los olores fuertes. Para conservarlo en condiciones óptimas se recomienda un lugar seco (con una humedad inferior al 50%), con una temperatura fresca (15-20 ºC) y apartado de la luz y cualquier otro tipo de elemento que desprenda olores fuertes, ya que podrían ser absorbidos por el chocolate. 

La inadecuada conservación térmica del chocolate puede provocar que el chocolate pierda su brillo característico y quede cubierto por una pátina grisácea. Esto es algo bastante común, que no afecta ni al sabor y ni a la calidad del chocolate y que puede arreglarse simplemente volviendo a temperar el chocolate. La exposición a la humedad o a la luz fuerte, en cambio, sí puede estropear por completo el chocolate.

En el siguiente vídeo podrás ver de una manera rápida y sencilla como se procesan las habas de cacao para separarlas en sus dos componentes principales: sólidos de cacao y manteca de cacao. 




martes, 8 de julio de 2014

Un día la vida me golpeó tan fuerte

lindas palabras... que te darán fuerza para seguir 


Un día, la vida me golpeó tan fuerte que me enseñó a resistir. Un día, me mintieron de tal forma que me dolió y entonces aprendí a ir siempre de frente con la verdad.

Un día, me falló quien menos imaginaba y entendí que las palabras hay que cumplirlas y de los actos, hacerse cargo.


Además, un día lastimé a alguien y fue ahí cuando aprendí a pedir perdón. Un día lo viví triste y cuando llegó la noche me di cuenta que es mucho más lindo sonreír que llorar.



Otro día, perdí mi tiempo con cosas que no valían la pena y noté que la vida pasa demasiado rápido para perdérsela esperando algo que nunca va a pasar. Un día, descubrí que tiene sentido enamorarse y pelear por lo que uno siente.

Después de muchos días entendí, que en la vida todos te van a lastimar, pero tienes que encontrar a las personas por las que vale la pena sufrir.

Tienes que sonreír. 
Tienes que saber amar. 
Tienes que tener la grandeza para aceptar tus errores y la valentía para pedir perdón.
 Tienes que compartir
Tienes que cumplir. 
Tienes que olvidarte de los que te critican y unirte a los que te quieren y por sobre todo tienes que vivir cada momento como si fuera el último...